martes, 12 de febrero de 2013

LÁGRIMAS

   Entrada, que va sobre las lágrimas...


   Hoy quiero escribir sobre esas gotas de agua salada que salen de nuestros ojos sin orden ni concierto. Tanto si son de felicidad como de tristeza recorren nuestras mejillas mojándolas a su paso, hasta que una mano, una manga o un pañuelo se empapa con su humedad. Hay otras que llegan mas allá, consiguen llegar a nuestros labios dejando un sabor salado y amargo que es difícil describir con palabras. También las hay de alegría y en este caso el sabor amargo no está y tan sólo un leve dulzor las hace diferentes de las otras lágrimas.

   Para mí llorar es una manera de desahogarme... de liberar mi alma de presión que la oprime. Hay veces que lloro con motivo, y otras empiezo a llorar y los motivos salen solos. No me gusta la tristeza que siento al mojar un pañuelo pero reconozco que en ocasiones no tengo alternativa. Cando la tristeza alcanza su lado máximo los ojos se humedecen y dejan vía libre a torrente de sentimientos en forma de gotas de agua salada. Cuando lloro lo hago con ganas, lloro mucho, hasta caer dormida o hasta notar ese característico dolor de cabeza.Cuando era niña también aparecía el hipo pero ahora ya no es así. Necesito llorar porque así consigo varias cosas: expresar gota  a gota los sentimientos que me invaden y para los que no tengo palabras, también necesito hacerlo porque es la única manera de descargar mi corazón de los sentimientos tristes que le hace sentir así y porque lo necesito para poder sonreír ampliamente.

   ¿Qué viene después de las lágrimas? Me gustaría decir que un tierno abrazo acompañado de unas palabras cariñosas, pero no siempre es así. En la gran mayoría la soledad y el silencio son los encargados de recordarme que vine sola a este mundo y de igual manera me iré. Dicho así suena muy duro y hasta dramático pero es real. Gracias a la ya citada soledad soy como soy, una persona fuerte y luchadora que cuando llora no es porque se rinda sino porque necesita dar un paso atrás para coger impulso.

   Con esta entrada no quiero que penséis que estoy triste ni llorando. Simplemente ahora y en este momento necesitaba escribir sobre las lágrimas. Además, también expresan alegría y no sólo tristeza. Incluso expresan emoción. Afortunadamente a lo largo de la vida he tenido que llorar por estos tres motivos. Tal vez sea porque soy una persona sensible y lloro por todo o simplemente porque mis ojos necesiten limpiarse de vez en cuando.

   ¿Y qué me decís de las lágrimas que no se ven? Esas que se derraman por dentro mientras por fuera esbozas una gran sonrisa. Esas sí que duelen, pero de verdad. Son las que te destruyen por dentro. Pero hay ocasiones en las que no puedes llorar, bien sea por orgullo o porque estás en el trabajo. No se pueden quedar dentro mucho tiempo y salen a la luz en cuanto tu cuerpo deja de estar en tensión y se relaja un poco. Entonces es cuando duelen. Notas como te queman las mejillas porque son lágrimas de verdad. Aplicado a los vinos serían como un vino con solera, un vino añejo que tiene mucho sabor y es fuerte. Esas lágrimas también son necesarias.

   Hay otras lágrimas, las de impotencia, que tiene una gran carga de sentimientos. En esta ocasión son duras porque es algo que deseas o quieres hacer pero no puedes porque la situación no te lo permite y la frustración se transforma en gotas de agua salada.

   Te animo a llorar. Tanto si eres una persona sensible como sino. Las lágrimas, a mi entender, no son síntoma de debilidad, al contrario, es algo que te empuja a seguir adelante. Tenemos que llorar pero no debemos quedarnos ahí, sino que hay que avanzar, seguir por este maravilloso camino llamado vida. Las lágrimas deben ser el trampolín que nos empuje mas allá del sentimiento de tristeza que generalmente es el causante de los lloros.

   Por hoy lo dejo aquí y te animo a decirme si has sentido algo al leer esta nueva entrada. Espero no haberte hecho llorar y lo he hecho confío en que haya sido de emoción, porque esas lágrimas, junto con las de alegría son las gotas de agua salada mas bonitas.

7 comentarios:

  1. Que bien Isa, escribir sobre el llanto es de valientes. Un besico.

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    1. ¡¡Gracias Olga!! Por visitarme y por tu comentario. He intentado mostrar las diferentes caras que tiene una lágrima. No siempre lo que parece triste lo es. ¡¡Un abrazo!!

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  2. Las peores lágrimas son las no derramadas, o las que en su momento tuvieron que haber salido y nunca asomaron a la esclerótica... esas lágrimas secas!!!!!

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    1. Gracias Mazinger por tus palabras. Lágrimas secas... me gusta. Pero bueno, nunca es tarde para llorar esas lágrimas... siempre que sean sinceras seguro que alguien dispuesto a secarlas. ¡¡Un abrazo!!

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  3. Bienaventurado el que llora porque de él es el reino de los vivos, no en el sentido más biológico de la palabra, si no en su sentido más trascendental, a veces tengo la sensación de ser un recipiente donde las emociones me llenan, me inundan de tal manera que muchas veces rebosan torrencialmente, otras de forma imperceptible y silenciosa me colman y vuelvo a rebosar suave y sutilmente; pero qué riqueza de sentimientos, sensaciones y pasiones, ¿hemos de sentir pesar por que esto nos ocurra así? yo creo que no, creo que somos afortunados de vivir intensamente.

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    1. Muchas gracias por tu comentario, Firmina. Estoy totalmente de acuerdo contigo. Las lágrimas nos ayudan a vivir intensamente. Un saludo.

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    2. Muchas gracias por tu comentario, Firmina. Estoy totalmente de acuerdo contigo. Las lágrimas nos ayudan a vivir intensamente. Un saludo.

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