jueves, 30 de septiembre de 2010

PLAN

Mientras un pequeño lloriquea en la terraza porque no puede poner la tapa de su escabadora y el el mayor hace los deberes, yo aprovecho para escribir unas letras.
Hace unos minutos he leído una entrada de un blog que sigo. En ella la autora habla de su etapa de monitora en unos campamentos de verano. Me ha hecho recordar la última vez que fui. Sin entrar en detalles, tan sólo diré que fue muy especial para mí. Conocí a un chaval con nombre raro, con el que compartí tienda de campaña. Fue divertido, sobretodo aquella noche en la que los monitores organizaron un baile e intentaron enseñarnos a bailar el vals o algo así. Me quedo con el sentimiento. Su mirada, mis pasos torpes, la luz de las estrellas... De eso ya hace muchos años. Lo que no me podía imaginar era que iba a recordar siempre su sonrisa. Cosas del destino, estuvimos trabajando juntos en el mismo centro comercial. Coincidimos en un bar con otros compañeros cuando yo no trabajaba allí y volvimos a vernos en una fiesta que organizó la tienda. En esta última ocasión, mi curiosidad pudo a mi vergüenza. Necesitaba preguntarle si él era el mismo con el que había dormido años atrás. Esa sonrisa, ese nombre...
Lo que acabo de escribir me hace reflexionar acerca del destino, de la vida. El primero pone a cada uno en su lugar. Y cuando piensas que nunca vas a ver a una persona, te la cruzas en la cafetería donde desayunas siempre. La vida es muy larga y lo mejor es llevarse bien con todo el mundo, nunca sabes quien te va a atender cuando lleves a tus hijos al pediatra.
Me gusta esto del blog, hoy cuando he empezado a escribir no sabía que iba a redactar una entrada de "Dedicado a..."

miércoles, 29 de septiembre de 2010

EL AMOR ES LO QUE TIENE...

Cara de gusto al saborear chocolate. Helados. Besitos de menores de edad... Son cosas que me gustan. Y quiero seguir haciéndolas. Nadie me impide poner cara de gusto cuando como chocolate en el curro, pero queda raro. Es extraño comer helados en invierno, y normalmente, mis chicos me besan cuando se van al cole o a la cama. Hoy estoy rebelde, me ha dado el cuarto de hora y desde mi espacio personal quiero expresar mi total disconformidad con la situación en la que me encuentro. Mi lado prudente me pide silencio,mi lado rebelde, guerra. El término medio es muy difícil de encontrar así que voy a aprovechar la última hora de un día de huelga para expresar mis reibindicaciones. Quiero seguir teniendo noches de conversación sin tele, quiero seguir quedando con mi gente, aunque no haya un cumpleaños por el medio, quiero... ¿Por qué no dejo de querer las cosas y me dedico a ir a por ellas? Por lo de siempre, por no molestar, por no agobiar, por miedo a escuchar una negativa... No puede ser, mi lado cobarde gana al rebelde. Lo mejor será que deje aquí la entrada, coja una hoja en blanco, y me dedique a escribir sin descanso hasta averiguar si merece la pena hablar claro o es mejor dejar que las cosas sigan su curso. Analizando los pros y los contras de cada una de las opciones creo que seré capaz de llegar a tomar una decisión... ¿la acertada? Seguramente no, pero haré lo que quiero. Mi lado rebelde se saldrá con la suya y seré capaz de asumir las consecuencias. En el fondo siento que la decisión está tomada. No puedo ir contra mí. Ahora sólo queda elegir las palabras adecuadas. Seguro que soy capaz de ello y en un par de días mente y corazón se sentirá libres de lo que hoy les oprime.

sábado, 25 de septiembre de 2010

CAMBIOS

Soy una persona que depende mucho de la gente. No me gusta la soledad porque necesito siempre la compañía de otro ser humano. Debido a mi inseguridad siempre intento tener todo bajo control. Empezando por los deberes de los peques y acabando por los días que voy a ver a mi novio. Pero sé que no puedo seguir así. Tal y como he leído y hasta escuchado en canciones, vinimos solos y solos nos iremos. así que he tomado una decisión. Bueno, en realidad son dos... No, tres... Bueno, da igual. No depender de la gente. Si alguien no me llama, es porque no lo necesita, no sirve de nada llevarme un mal rato porque el teléfono no suena. No sé muy bien donde, pero estoy convencida que la soledad tiene su lado positivo y se lo voy a encontrar. En cuanto a la inseguridad y lo de controlarlo todo... ¡Se acabó! Voy a ser consciente de donde estoy y como he llegado aquí. Los pasos que me han llevado hasta la silla del ordenador han sido fáciles, era lo que quería hacer. No he dudado si lo encendía o no. Simplemente, quería hacerlo. Como esto, y si lo pienso un poco, todo lo que he conseguido ha sido igual. He pensado el objetivo, buscado el camino y andado por él. Sin miedo, sin dudas, sin inseguridades. Lo más difícil es lo primero y es de lo único que me voy a preocupar, de saber lo que quiero. De esta manera conseguiré vencer a la inseguridad, porque no tendrá por donde atacar. En cuanto a lo de tener todo bajo control... Cada uno es como es. Pero cuando como eres no te aporta cosas positivas lo mejor es cambiar ¿no?. Así que nada, a partir de hoy mismo, sólo intentaré controlar aquellas cosas que están a mi alcance. Las visitas, o si los peques se van a hacer daño en el colegio o no, no entran dentro de mi radio de acción. Así que dedicaré a mi tiempo a disfrutar más y preocuparme menos. Dicho todo así suena muy bonito. Pero haré todo lo posible por cumplirlo. Ya he perdido demasiado tiempo ocupándolo en cosas que no dependen de mi y dejando de lado aquellas otras que sí. No sé si sois muchas o pocas las personas que leen esto, y no pienso preocuparme por ello ya que no entra dentro de mi radio de acción. Pero si a alguien se le ocurre alguna manera de vencer a la soledad o atacar a Doña Inseguridad, que me lo diga. Estaré encantada de escucharle/leerle.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

"La historia se repite" . Piensa María tumbada en la cama. Tiene un libro entre manos. El silencio de la casa sólo es roto por el piar de las golondrinas. Cierra los ojos y recuerda las tardes que pasaba en su habitación, de pequeña. Los años han pasado, la casa no es la misma pero el sentimiento no cambia. Se siente sola. Suspira mientras deja el libro a un lado de la cama. Está triste. Hace tan sólo unos días que su novio ha cortado con ella. Cuando mejor estaban él le dijo que no sentían lo mismo. Que la quería pero no la amaba y que sabía que nunca iba a amarla. María tan sólo pudo asentir con la cabeza, abandonó el bar y caminó hacia casa observando la ciudad de noche. Le gustaba ir andando a casa cuando salía de fiesta con sus amigas. Le encantaba sentirse la reina de su barrio. La calle principal, siempre llena de gente, a esas horas parecía una calle fantasma. Ahora son las siete de la tarde y hace mucho calor. No tiene ganas de pasear. No tiene ganas de ver la tele. No tiene ganas de leer. Coge un cuaderno y un boli e intenta escribir como se siente. De nuevo, un relato sobre la soledad, o sobre la muerte sale de la tinta del bolígrafo. Le gusta escribir sobre cosas que le dan miedo. Es una manera de enfretarse a ellas. Ella lo sabe, sabe que sus letras van a ser deprimentes. No. Hoy no. No quiere seguir siendo la chica triste que ha sido toda la vida. De una vez por todas quiere dejar atrás a la pequeña de ocho años que leía libros en la soledad de su habitación mientras las golondrinas piaban sin cesar surcando el cielo de la gran ciudad. En aquella época ella no podía salir de casa. Ahora sí. Ahora es tan libre como cualquier pájaro.

lunes, 20 de septiembre de 2010

ACTITUD POSITIVA.

Poco a poco, tímidamente, va llegando el invierno. Por lo que me ha dicho el peque de la casa, mañana empieza el otoño. Frío, pereza, madrugar... Son palabras que trae consigo el cambio de estación. También trae otras como rutina, deberes, cambios... Para mí, igual que para tantas otras familias, el año empieza con el curso escolar. Digo adiós al verano guardando el bañador que sólo utilicé un día y saludo al frío buscando las chaquetas. Cada año es distinto, diferente, y este trae muchas novedades. El 2010 empezó con un cambio importante en mi vida. Pensaba que sería el único, pero no fue así. Le acompañó otro gran cambio y ahora, en la soledad de mi hogar, intento asumirlos todos de la mejor manera posible. Es duro el cambio de estación. Miro con enfado las deportivas mientras dedico una última caricia a las sandalias. Pongo las alarmas en el móvil a horas alarmantes. Respiro hondo e intento relajarme cuando la cena no gusta a los reyes de la casa, después de estar horas dudando entre carne o pescado. Sonrío cuando una brisa de aire fresco me ayuda con los deberes mientras intento que poner la lavadora sea algo divertido. Como decía, el cambio de estación es duro. Pero el cambio en el terreno personal aún mas. Ahora estoy feliz y vivo el momento, en ocasiones estoy convencida de que estoy haciendo algo mal. Tiene que estar prohibido ser tan feliz. El chocolate me hace feliz, pero engorda, no trabajar me hace feliz, pero las vacaciones se acaban. Pero bueno, mientras no me engorde ni se acabe, pienso seguir siendo feliz. Aprenderé a disfrutar del frío, le sacaré el lado positivo a no poder salir a la terraza porque llueve y pondré una alegre melodía para despertarme cada día.

miércoles, 15 de septiembre de 2010

ROTURA DE CLAVÍCULA.

Hoy ha sido un día mas bien tranquilo. Nada que ver con el día de ayer. Una nueva celebración de cumpleaños ha conseguido que reuniera a dos de mis amigas. Tan sólo dos. Una no ha podido venir y de la otra no se nada. Al resto no las he invitado.No tenía ganas. Ayer fue un día muy largo, una tarde de estas que parece que no van a acabar nunca. Mi chico, el cumpleañero, tan sólo tiene un hueso roto, pero cada vez que recuerdo el susto se me encoje el corazón. La sensación de impotencia, de ganas de cambiarme por él, sentir su dolor y que él no lo sintiera... horrible. Todo ha quedado en un susto, no es nada grave, pero habría preferido que no sucediera. Mañana ya es jueves, llega el fin de semana con celebración de cumpleaños incluída y en este momento no tengo muchas ganas. Estoy algo apagada. Imagino que será por el susto y que ya mañana, con la rutina, volveré a ser yo. Esa chica que día a día lucha por ser feliz sin tener muy claro en qué consiste la felicidad... Buena frase para ponerlo en el muro. ¿En qué consiste la felicidad? No espero que nadie me responda, únicamente la pregunta me sirve como reflexión.

jueves, 9 de septiembre de 2010

¿SENSIBLE O TONTA?

Hay gente que me dice que no soy tonta, sino muy sensible y que por eso lloro y lo paso mal. Yo me considero tonta. No debería llorar, es ley de vida, y al fin al cabo, no conocía al animal. Todo empezó la noche del lunes. Vi a una paloma en mi terraza. Supuse que había venido a pasar la noche y no le di mayor importancia. Al día siguiente el animal seguía en el mismo sitio. No quería pasar la noche, quería morir en la tranquilidad de mis baldosas. Era mayor y no podía volar, las alas no le respondían. Me dio pena, mucha pena, pero fui incapaz de meterla en una bolsa y tirarla a un contenedor. Así que llamé al ayuntamiento para que un especialista recogiera al animal. El mismo martes, por la noche, yacía en el mismo sitio donde había estado por la mañana. Sentí pena. Ya lo sé, es ley de vida, y un día me encontaré con la misma suerte que ha corrido la paloma, pero eso es algo en lo que prefiero no pensar. El miércoles por la mañana no vino el señor, y yo cada vez sentía más lástima. No veía capaz de quitarla de ahí. El jueves el señor en cuestión llamó reclamando al animal metido en una bolsa. Fui amable y le pedí que subiera él mismo, que yo no era capaz de hacerlo. Ante su negativa alegando que no era su trabajo, que no podía entrar en mi propiedad privada, le di las gracias y se fue. Un amigo hizo el levantamiento del cadaver y yo, cada vez que miro a la terraza, me parece verla ahí, en una esquina de la baldosa, con el cuello retorcido. He pasado un día malo y espero que mañana, cuando haya dormido unas horas, estaré más animada y mi terraza volverá a ser lo que era, mi gran terraza.

domingo, 5 de septiembre de 2010

MULTIUSOS

Madre, novia, ex-mujer, teleoperadora, ama de casa, amiga... Todo eso y algo más soy yo. Hoy me ha dado por pensar en ello y siento agobio. Soy una persona perfeccionista. Quiero que todo salga bien, que todo el mundo esté feliz y me cuesta darme cuenta de que no siempre puede ser así. Ahora estoy de vacaciones, el martes los chicos empiezan el cole, así que voy a intentar tomarme las cosas con calma. Voy a disfrutar en cada momento de lo que haga y lo que tenga que ser, será. Ya vendrán los deberes, los malos entendidos, los problemas con los clientes... Sólo espero que mi experiencia en algunos aspectos de la vida sirva para algo y ayude a que las cosas vayan como tienen que ir. En otros aspectos soy novata, o casi novata. Ojalá sea capaz de mirar hacia adelante y saber solucionar los problemas conforme vengan. Sé que no estoy sola, que cuento con apoyo, pero en el momento de tomar las decisiones la encargada es una servidora. Bueno, doy por finalizada la entrada, estoy enganchada al granjero que busca una esposa. ¿Realmente sabe lo que busca? Mira que luego todo se complica...